Introducción
Uno de los principales retos a los que nos enfrentamos en MigratioLex al tramitar residencias para profesionales cualificados extranjeros es la desigualdad de criterios documentales entre países. Aunque España ha avanzado notablemente en la digitalización de la administración y en la emisión de certificados oficiales, lo cierto es que no todos los países cuentan con sistemas equivalentes. Esta disparidad puede dificultar la acreditación del perfil profesional del solicitante, tanto en solicitudes de residencia como profesional altamente cualificado como en las de residencia para nómadas digitales.
El estándar español: digitalización y trazabilidad
En España, es habitual contar con documentos como:
- El Informe de vida laboral (con histórico detallado de cotizaciones y empleadores),
- Contratos registrados,
- Certificados de empresa normalizados,
- Y un sistema de Seguridad Social que permite verificar con facilidad la trayectoria profesional.
Esto ha generado una expectativa tácita por parte de las autoridades migratorias: que los ciudadanos extranjeros puedan presentar documentos de valor probatorio similar, independientemente del país de origen.
Pero, ¿qué ocurre cuando no existen esos documentos?
En la práctica, muchos países —incluidos algunos altamente desarrollados como Reino Unido, Estados Unidos, Canadá o Australia— no disponen de un sistema equivalente al informe de vida laboral. Y esto puede suponer un problema serio para acreditar:
- Antigüedad en una empresa,
- Nivel de responsabilidad,
- Ámbito de actuación,
- O simplemente la existencia de una relación laboral formal.
Además, hay jurisdicciones donde no se registra oficialmente el cargo ocupado, o donde los contratos no tienen un formato uniforme, lo que dificulta la comparación objetiva con los estándares españoles.
¿Qué entendemos por perfil altamente cualificado?
Según la normativa española, se considera altamente cualificado al profesional que:
- Tiene titulación universitaria o formación equivalente,
- Ocupa un puesto técnico, directivo o especializado,
- Percibe un salario que supera ciertos umbrales (según el tipo de permiso solicitado),
- Y cuya experiencia laboral avala ese nivel de cualificación.
Ahora bien, estos criterios deben probarse documentalmente, y aquí es donde entran las dificultades.
¿Cómo resolvemos este reto en MigratioLex?
La clave está en aplicar una estrategia de prueba flexible y jurídicamente sólida. En MigratioLex abordamos estos casos con un enfoque adaptado a cada jurisdicción, teniendo en cuenta la libertad probatoria que permite el derecho administrativo español. Algunas de las soluciones que aplicamos son:
- Declaraciones juradas de empleadores con información detallada sobre funciones, salario y antigüedad.
- Cartas de recomendación firmadas por directivos, con referencias verificables.
- Contratos laborales extranjeros, aunque no estén registrados oficialmente.
- Nóminas, pagos bancarios o declaraciones de impuestos que demuestren ingresos y vinculación laboral.
- LinkedIn y perfiles profesionales públicos, como complemento a la documentación oficial.
Además, elaboramos un informe jurídico técnico que acompaña la solicitud, explicando por qué en esa jurisdicción no se expide cierta documentación y argumentando la validez de las pruebas alternativas presentadas.
Cada país, un contexto probatorio distinto
No es lo mismo acreditar experiencia en Alemania, donde todo se documenta meticulosamente, que hacerlo desde países donde gran parte del empleo es informal, o donde la administración no emite certificados laborales normalizados.
Incluso dentro de la UE, las diferencias pueden ser significativas. Esto no debería suponer un obstáculo para profesionales altamente cualificados, pero en la práctica, la falta de documentos “a la española” puede ralentizar o poner en riesgo una solicitud, si no se justifica adecuadamente.
Conclusión: el fondo sí importa, pero la forma también
La administración española exige una prueba clara y suficiente del perfil profesional, pero no necesariamente tiene que adoptar el formato exacto que se expide en España. Lo importante es demostrar de forma coherente y creíble que el solicitante cumple con los requisitos de cualificación, experiencia y funciones.
Un ejemplo claro de esta situación lo encontramos en uno de nuestros casos de éxito, en el que obtuvimos la residencia como profesional altamente cualificado para un ciudadano marroquí del sector agrícola. Debido al contexto socioeconómico de su país y a las características del sector, nunca tuvo la posibilidad de cotizar a la seguridad social nacional. Aun así, logramos acreditar su experiencia y cualificación mediante pruebas alternativas sólidas.
En MigratioLex entendemos que cada trayectoria es única, y por eso adaptamos nuestra estrategia documental a la realidad de cada país, sin perder de vista el estándar que exige la normativa española.
Si vienes de un país donde no existe informe de vida laboral u otros documentos oficiales similares, no te preocupes. En MigratioLex analizamos tu caso y construimos una estrategia probatoria adaptada a tu situación.
Contáctanos y te ayudamos a demostrar tu perfil profesional con garantías.